Más de tres cuartas partes de la Tierra se está volviendo más seca, lo que lleva a la pérdida de bosques, vegetación y la degradación del suelo. Los gobiernos también están llevando a cabo experimentos de geoingeniería, causando una crisis sin precedentes.
Aproximadamente la mitad de la población de África vive en tierras secas, y el continente se enfrenta actualmente a hambrunas. Europa, Brasil y la mitad occidental de los Estados Unidos también están experimentando un rápido secado.
Esta transformación está causando pérdida del PIB, migración forzada, aumento de la mortalidad debido a las tormentas de tierra, empeoramiento de los incendios forestales, erosión de la tierra, degradación de la vegetación y salinización del agua y el suelo.
Europa se ve especialmente afectada, con el 95,9% del continente en proceso de desertificación. El agua no se crea ni se destruye, sino que se reubica. La tendencia dominante a nivel mundial en los gobiernos es estar eliminando despiadadamente bosques y pastizales.
La deforestación en las regiones productoras de interrumpe los ciclos hídricos locales y expone los suelos a la degradación, lo que conduce a que contengan menos el agua y reduce la capacidad de recuperación de la tierra. La crisis de aridez es una amenaza significativa que afecta a miles de millones en todo el mundo, con sequías que terminan y climas más secos que redefinen la vida en la Tierra.
El secretario ejecutivo de la CLD, Ibrahim Thiaw, advierte que miles de millones se enfrentan a un futuro marcado por el hambre, el desplazamiento y el declive económico. Incluso si pudiéramos resolver completamente la crisis de aridez, seguiríamos enfrentando hambruna global debido a la pérdida del suelo, la pérdida de polinizadores y las partículas microplásicas saturando el suelo.
Hambruna más de tres cuartas partes de la Tierra se está volviendo más seca
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