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La startup de salud basada en Austin Confidant Health ha sido acusada de perder un estimado de 5.3 terabytes de sus datos de salud mental en la web abierta. La filtración incluyó más de 1,7 millones de registros de actividad, perfiles psicológicos, sesiones de terapia y licencias de conducir para pacientes.
Confidant Health, que tiene como objetivo construir «la próxima generación de atención virtual» para pacientes de salud mental, almacenó archivos confidenciales de pacientes en una base de datos no protegida con contraseña.
El experto en ciberseguridad Jeremiah Fowler descubrió la filtración, afirmando que los archivos de audio y vídeo del paciente contenían «traumas familiares desgarradores, realmente dolorosos, trauma personal».
Fowler optó por no descargar ninguna de la información médica privada o intentar acceder a las bases de datos protegidas con contraseña, pero advirtió que un hacker dedicado podría entrar fácilmente. Los datos filtrados fueron recogidos por los chatbots propietarios de Confidant e inteligencia artificial (IA).