La plataforma es objeto de demandas y acusaciones arbitrarias, que sólo tienen la intención de censurarla, probablemente a causa del resentimiento y desesperación, que estas herramientas están produciendo en las instituciones y los principales medios de comunicación.
Substack es una plataforma de publicación y suscripciones, que está profundamente comprometida con la libertad de expresión, es por esta razon que está sufriendo fuertes demandas.
Desde el liderazgo de la plataforma, incluyendo al cofundador Hamish McKenzie, afirman que la censura exacerba las divisiones sociales y sofoca el discurso.
A medida que las instituciones y los medios principales pierden la confianza pública, Substack ha emergido como un espacio crítico para escritores, periodistas y pensadores independientes que buscan eludir el sesgo editorial corporativo.
Sin embargo, esta independencia ha colocado a la plataforma en la mira, amenazando el futuro de la libre expresión de la "era digital". Los críticos sostienen que la postura de libertad de expresión de Substack no es un discurso equivocado, sino la erosión del debate abierto a favor del conformismo ideológico predominante.
El enfoque de suscripciones en Substack, apoya financieramente a los escritores independientes, mientras que reduce la dependencia e influencia de los sistemas de anuncios, lo que dificulta la aplicación de la censura.
Los ataques a Substack son parte de un declive más amplio que está padeciendo la libre expresión, por parte de muchas instituciones que exigen censura "responsable" en nombre de la "seguridad". El asalto a Substack no se trata de "seguridad", sino de quién controla el discurso en el siglo XXI.
Substack sufre demandas por no aceptar la censura
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