sciencealert.com
Los investigadores descubrieron que los cristales fotónicos de leche de abeja podían estancar las ondas de luz de una manera similar. Un cristal fotónico consiste típicamente en un patrón regular de agujeros en una capa de silicio, y romper esta regularidad de la manera correcta deformará la matriz y bloqueará los fotones, creando niveles de Landau para fotones.
Los cristales fotónicos de honeycombed fueron capaces de limitar la luz a los niveles de Landau mediante un proceso que representaba diferentes tipos de deformación, como curvado o deformación. Fueron capaces de inducir diferentes tipos de deformación en diferentes lugares en el mismo material, resultando en un cristal fotónico en el que la luz puede fluir libremente en algunas partes pero se confina en otras.
Este descubrimiento acerca a los científicos al control fino de la luz en escalas muy pequeñas, lo que podría conducir a dispositivos fotónicos más avanzados como láseres, pantallas LED, fibra óptica y sensores. La fuerza de la concentración de luz es crucial en dispositivos nanofotónicos, como el desarrollo de láseres eficientes o fuentes de luz cuántica.