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Los alarmistas del cambio climático afirman que el calentamiento global es la causa del calor en los meses de verano. Sin embargo, el profesor de meteorología David Dilley, ex meteorólogo y CEO de Global Weather Oscillations, sugiere que el planeta está a punto de enfriarse, lo que podría causar verdaderos problemas. La Tecnología de Pulso de Dilley, basada en los ciclos geomagnéticos del Sol, la Luna y la Tierra, predice que el calentamiento global estará muerto para 2030.
Sin embargo, Dilley argumenta que el calor del planeta ayuda a la vida a proliferar manteniendo los niveles de dióxido de carbono en niveles ideales. El sol, no el dióxido de carbono artificial, es el principal determinante del cambio climático. También explica que la luna juega un papel en el cambio climático, ya que influye en las mareas y el movimiento oceánico.
Dilley también señala que el dióxido de carbono representa apenas el 0,04% de la atmósfera, y los humanos sólo producen el 1% de ella. También enfatiza que más dióxido de carbono es mejor para la Tierra que demasiado poco, ya que es esencial para el crecimiento de las plantas y la vida animal y humana.