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Las Naciones Unidas presentaron el «Mundo del Futuro» en su reunión anual en Septiembre de 2024 en Nueva York, exponiendo un mundo totalmente digitalizado. Este paquete de esclavización y opresión digital fue planificado bajo casi completa ignorancia del público, con la mayoría de los parlamentos y gobiernos en todo el mundo aceptándolo.
El WEF llama a esto la 4ta Revolución Industrial, y los estados de todo el mundo se han visto obligados a aceptarla sin el consentimiento del pueblo. Todos los aspectos de nuestras vidas, incluyendo el gasto en dinero, datos de salud, hábitos alimenticios, viajes, preferencias de televisión, favoritos de radio, amigos y hábitos de compra, serán controlados digitalmente por el sistema de control corporativo digital de IT.
Los códigos QR, que representan la respuesta rápida, controlarán todos los códigos personales, conociéndonos potencialmente mejor que nosotros mismos. El debate de este pacto digital tuvolugar a puerta cerrada. El pacto digital es un sistema que obliga a individuos y gobiernos a un mundo digital, sin «opción voluntaria» disponible.
El pacto explica las ventajas de las tecnologías digitales para el bienestar humano, pero es crucial que no queden brechas entre las personas y los países. El objetivo del bienestar humano general se justifica con el rápido avance hacia la plena digitalización.
La ONU ha sido impulsora plena de esta empresa destructora de la humanidad, con un Acuerdo de Cooperación entre la ONU y el WEF firmado en junio de 2019. Los recursos y el presupuesto de la ONU son administrados por grandes corporaciones, quienes decidirán las direcciones digitales. El estrangulamiento digital no tiene consideración alguna y aquellos que resisten pueden ser fácilmente desplazados.
Hacia un orden de opresión digital, control digital millones de personas
