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El Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, advierte de un peligroso cambio de ransomware a «killware» a medida que los ciberataques se vuelven más frecuentes y con mayor gravedad. El ataque de ransomware del oleoducto colonial en abril causó daños significativos al suministro de gas a lo largo de la costa este.
El reciente intento de hackeo de una instalación de tratamiento de agua en Florida demostró los graves riesgos de actividad cibernética maliciosa para la salud pública y la seguridad. Con el aumento de los dispositivos conectados a Internet, los hackers tienen más debilidades potenciales que explotar.
Gartner advierte que los ciberatacantes tendrán entornos de tecnología operacional armados para dañar o matar humanos en 2025. Los proveedores privados de atención médica a menudo no reportan hacks de ransomware al gobierno, lo que lleva a costos significativos para las organizaciones.