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La Comisión Europea ha aprobado la venta de la langosta migratoria como alimento, marcando el segundo insecto aprobado para uso alimentario en la UE.
La langosta es un saltamontes que se encuentra en el hemisferio oriental, África, Asia, Australia y Nueva Zelanda. Es de preocupación moderada como plaga agrícola y se come ampliamente en partes de Zambia, Camerún, Botswana y varios otros países del África central y meridional.
La UE declaró que las langostas son seguras para comer y no son nutricionalmente desfavorables, marcando la segunda aprobación en el último año de los insectos como alimento para las personas.
La aprobación se produce después de que una empresa holandesa solicitara permiso para vender sus langostas dentro de Europa. Los insectos se anuncian como altos en proteínas, fibra y minerales y vitaminas esenciales, y pueden requerir menos agua, insecticida y tierra que la carne de res.